EDITORIAL
Queremos transformar la escuela, las instituciones educativas... porque ya es imprescindible hacerlo, los tiempos lo exigen, y ahora con la crisis sería aún más irresponsable no hacerlo.
Por ello vamos revisando los objetivos educativos, para adecuarlos a las necesidades de nuestra sociedad actual, discriminando claramente los que resultan indispensables de los que serían deseables.
Experimentamos nuevos recursos y metodologías, para que los estudiantes logren una mejor formación, alcanzando lo más ampliamente posible estos objetivos acordes a las necesidades de los ciudadanos del siglo XXI, y también para reducir significativamente estas vergonzosas cifras de fracaso escolar (y de fracaso de los agentes educativos).
Facilitamos formación al profesorado y a los gestores educativos, para aumentar su eficacia y eficiencia, y con ello la autoestima y el reconocimiento social.
Y hacemos muchas cosas más aprovechando las posibilidades de instrumentos metodológicos como el currículum bimodal y el trabajo colaborativo, herramientas físicas como las pizarras digitales y los dispositivos digitales de tratamiento de la información (netbooks, tabletas...), Internet y aplicaciones y recursos multimedia como libros de texto digitales, EVA, recursos 2.0...
En DIM sabemos que en Educación tenemos muchos problemas, sí, pero no nos quedamos en el lamento y en la impotencia, no nos quedamos en la crítica -por supuesto necesaria-, no nos quedamos satisfechos con encontrar "culpables" en los que descargar nuestra responsabilidad, ni con esbozar posibles soluciones que se queden en el papel... Además de todo esto, en DIM actuamos sobre la realidad de las aulas que pretendemos transformar. Entre aciertos y errores, pero buscando y aplicando soluciones, aprendiendo a través de la una continua investigación y acción.
En esta línea de acción y compromiso social que hemos esbozado, con el apoyo y el buen trabajo de los integrantes de esta pequeña comunidad que es DIM, recopilamos una vez más en esta publicación investigaciones, experiencias, puntos de vista y recursos que pensamos pueden ayudarnos en la reflexión sobre nuestro trabajo y que pueden servirnos de guía en estos duros pero apasionantes quehaceres del mundo educativo.
Una vez más, gracias a todos por compartir.